Por su interés, paso a reproducir este artículo de Amanda Figueras, aparecido
en elmundo.es el domingo 29 de Abril de 2012.
"¿Pero qué es
lo que tenemos que les molesta tanto?"; "Yo no hago mal a nadie, no
les incumbe si llevo un velo o no"; "Creo que es por miedo, sólo les
llegan cosas negativas sobre nosotros y no se preocupan por saber cuál es la verdad".
Frases como estas son comunes entre los musulmanes que viven en países en los
que representan una minoría. Y para los que toman esta religión ya de adultos
-para sorpresa de sus familias-, el momento de hacerlo público es descrito como
angustioso en lugar de liberador.
"Sería como
el 'salir del armario' para los homosexuales solo que en otro sentido",
dice Habiba. Ella es española, reconoce que lo de cambiarse el nombre
por uno islámico es una costumbre que no le gusta, pero prefiere no dar su
identidad real. Abrazó el islam en 2008 pero sólo hace unos meses lo ha hecho
'oficial' en su entorno. "Quería estar bien preparada para enfrentarme a
todas las preguntas que me esperaban, para desmontar los prejuicios",
explica.
Según un informe
de Amnistía Internacional presentado esta semana, los musulmanes en Europa
sufren discriminación por motivos de religión o de creencias en el ámbito
laboral y el educativo. Tras analizar la situación de quienes profesan esta
religión en Bélgica, España, Francia, Países Bajos y Suiza, la ONG afirma que los sondeos de
opinión reflejan "miedo, desconfianza y opiniones negativas sobre los
musulmanes y la cultura islámica".
'Vete a tu
país'
"La frase más
común que nos dicen es 'vete a tu país'. Ya me he cansado y no contesto... a
muchos no les entra en la cabeza que no soy extranjera, que soy española,
vasca", se queja Jennifer Chamizo, que ahora tiene 25 años y abrazó
el islam (expresión que los musulmanes prefieren a la palabra 'converso') con
20.
Desde pequeña las
preguntas existenciales la agobiaban pero a su alrededor nadie le daba
importancia. "El destino [los musulmanes no creen en las casualidades]
hizo que me encontrara con quien ahora es mi marido y que me fuera explicando
de qué manera el islam podía darme respuestas", cuenta Jennifer, que el
fin de semana pasado viajó desde Bilbao a Madrid para asistir a un seminario
sobre religión.
Para ella, el
momento de hacer pública su decisión fue complicado porque se encontró con el
rechazo de su familia. "Fue un proceso rápido y mis padres pensaban que
era una tontería de juventud. Pero cuando hice la 'shahada' (la declaración de
fe al islam) quería practicar, rezar. Mi madre abría la puerta de la habitación
en la que estuviera y me decía que no podía hacer eso en casa". Jennifer
decidió que no quería tener una doble vida, se casó y se fue de casa. Hoy tiene
un hijo de tres años.
Esa misma
sensación de frustración por tener que reprimir su opción religiosa asfixiaba a
Layla Hajar (ella sí
prefiere dar su nombre 'islámico'), española de 27 años y residente en
Tenerife. "Me empecé a interesar por el islam tras los atentados del 11S.
Todo el mundo hablaba mal de los musulmanes, los acusaban. Yo me di cuenta de
que no sabía nada de ellos y empecé a buscar información". Recuerda que
cuando empezó a sentirlo en su corazón cambió "un poco" su modo de
vida. "Dejé de fumar y de beber, ya no visto con escotes o faldas cortas
y, aunque sigo saliendo de vez en cuando con mis amigas, no lo hago tanto.
Simplemente trato de llevar una vida más sana".
Dejó pasar un
tiempo hasta que se decidió a decirlo en casa, y sólo se atrevió a confesarse
con su madre y sus hermanos. "Ella es profesora, ha estudiado sobre las
diferentes religiones, ha estado con gente de otras culturas. Mi padre es más
cerrado, un poco racista y me daba miedo su reacción". Pero hay cosas
difíciles de esconder, como el ayuno en el mes de ramadán...
Expresión de
identidad
Un 'hiyab'
tampoco se puede ocultar, por eso le obligaron a quitárselo. Así al menos lo
cuenta la marroquí Mariam El Moden,
de 22 años y que aunque ahora vive en Alemania con su marido, ha pasado toda la
infancia y juventud en España. "Desde el día en que puse un pie en este
país me han tratado mal". Mariam ha tenido mala suerte, denuncia acoso e
incluso agresiones físicas tanto en el colegio como en el ámbito laboral.
Con su título de
auxiliar de enfermería comenzó unas prácticas en el Hospital Residencia Sant
Camil donde la primera condición era que se quitara el velo. "Necesitaba
mucho el trabajo así que accedí a quitármelo. Estuve de prácticas y después
cogieron a mis seis compañeros, a todos menos a mí". Mariam se pasó un año
mandado su curriculum casi cada semana hasta que le llamaron para cubrir una
baja en el turno de noche, "sin 'hiyab', claro".
Por su parte,
fuentes oficiales del centro han desmentido que tengan una política específica
para el uso o no uso del velo durante el desarrollo de la actividad
asistencial. No obstante, matizan que "existen unos criterios de
uniformidad en los que se establece cuál debe ser la indumentaria del personal
de enfermería, así como regulaciones acerca de joyería, pelo (debe estar
siempre recogido). Es bajo estos criterios que se recomienda a todos los
profesionales del área de enfermería que se ajusten por motivos de uniformidad
del personal e higiene, con el fin de garantizar la máxima seguridad al
paciente".
La joven denuncia
que el rechazo era constante: "Cuando los compañeros se daban cuenta de
que no era española empezaban los problemas. Yo creo que no es ni por el velo
ni por la religión, simplemente no quieren a los que son diferentes de
ellos". Amnistía Internacional recoge un estudio que sitúa la cifra de
musulmanes en España en el 2,3% de la población.
Muchos de los
consultados reconocen tener que esconder que son musulmanes en el trabajo...
pero quieren mantener el anonimato. "¿Problemas? claro, no lo hablo de mi
religión... mis jefes no lo tolerarían y yo de momento no tengo otro
empleo", dice uno de ellos.
Fuentes conocedoras de la comunidad musulmana en
Madrid cuentan que, salvo raras excepciones, quienes acuden a las mezquitas
para hacer la 'Shahada' nunca lo hacen acompañados por sus familiares, pese a
ser un acto muy importante para ellos.
"Muchos
creen que España es tolerante, también yo pensaba así, pero cuando tú eres la
diferente comprendes, sientes, que sigue habiendo mucho rechazo", sostiene
Habiba.
El 37% de los
españoles cree que es aceptable expulsar del colegio a una estudiante
simplemente porque lleve el pañuelo y el mismo porcentaje afirma que deben
apoyarse las protestas en contra de la construcción de lugares de culto
musulmanes, según AI.
Autora: Amanda
Figueras Fuente: Elmundo.es
11 comentarios:
Cualquier Religión y toda iconografía de cualquier religión fuera del ámbito público.
Así no habrá problemas ni con moros, judíos cristianos o adoradores de la Luna Llena.
Saludos.
Total de acuerdo con anónimo.
Religión sucks
La angustia de decir que no eres musulman en cualquier país árabe.
Me quedo con esto
"Dejé de fumar y de beber, ya no visto con escotes o faldas cortas y, aunque sigo saliendo de vez en cuando con mis amigas, no lo hago tanto. Simplemente trato de llevar una vida más sana"
aunque para llegar a esto no hace falta hacerse musulmán. Simplemente, ¡por Netón!, retornar a nuestra religión, el paganismo de nuestros ancestros celtíberos.
Pues si Europa discrimina a los musulmanes, agárrate a los países árabes , que esos si que discriminan a todo Dios y sobre todo a las mujeres.
A mi me da igual como vayan vestidas siempre que respeten las leyes de mi país, nunca entenderé a la mujer que nace libre y decide abrazar una religión que la oprime y no tienen ningún derecho,ni como mujer ni como ser humano.
Maikel, creo que tienes una idea muy equivocada de lo que es el Islam. En ninguna parte del Corán se dice que se oprima a las mujeres ni que no tengan ningún derecho. Me parece que tienes demasiados prejuicios, y te lo digo sin ninguna acritud.
Me remito a lo que reza El Coran:
Corán: (2:228) Los derechos de las mujeres con respecto a sus maridos son iguales que los derechos de estos con respecto a ellas.
Las últimas palabras del profeta Muhammad antes de su muerte fueron: “Tratad bien a las mujeres”.
Salam.
si , si y a la hora de la verdad la humillación hacia la mujer.
No nos cuentes películas.
No cometas el error de juzgar a la gente que no conoces,yo no tengo prejuicios contra nadie simplemente doy una opinión, de algo que conozco en mi entorno y que he visto a través de documentales,televisión y leido.
El Corán así como la Biblia la han hecho los hombres, por lo tanto para mí no es un referente para el comportamiento de los musulmanes o cristianos.
Una cosa es lo que dice el Corán y otra lo que la gente hace y el comportamiento miserable y la lectura interesada y manipulada que se hace del Corán. Cuando defiende la igualdad entre el hombre y mujer que hoy no existe.
Dios todopoderosos en el Islam desde hace más de 14 siglos, por medio del Sagrado Corán declara la igualdad de hombres y mujeres en la vida, el honor, la dignidad y en la sociedad en general, respetando los bienes de ambos(hombres y mujeres), Dios nos dice que los bienes de todas las personas son sagrados y por lo tanto está prohibido menoscabar directa o indirectamente, todos estos derechos son comunes a hombres y mujeres sin ninguna distinción.
En el Sagrado Corán, Dios todopoderoso nos enseña esta igualdad entre el hombre y la mujer, no solamente porque nos lo ordena de una manera clara, sino también por cuanto en muchas Ayas Dios se refiera tanto a la mujer como al hombre en sus derechos y obligaciones sin hacer distinción. Veamos al Sura 33, Aya 35: "Dios ha preparado perdón y magnífica recompensa para los musulmanes y las musulmanas, los creyentes y las creyentes, los devotos y las devotas, los sinceros y las sinceras, los pacientes y las pacientes, los humildes y las humildes, los que y las que dan limosna, los que y las que ayunan, los castos y las castas, los que y las que recuerdan mucho a Dios". También en el Sagrado Corán Dios les dedicó un capítulo entero (Sura) la número 4, dándole por nombre "Las Mujeres". Se necesitarían muchos volúmenes, para analizar todas las bondades y derechos que Dios le ha dado a la mujer en el Islam hace más de 14 siglos y que están escritos en el Sagrado Corán y los Hadices del Profeta -La paz y las bendiciones de Dios sean con él.
Pues entonces, Maikel, me estás dando la razón, porque todas las citas que has puesto del Corán demuestran que Dios estableció la igualdad entre hombre y mujer. Si algunos sistemas legislativos discriminan a la mujer pues habrá que denunciarlos pero lo que no se puede hacer es decir como dices tu que la religión islámica oprime a la mujer y le niega sus derechos porque eso es meridianamente falso, como tu mismo has demostrado.
Saludos.
Claro que te doy la razón,la palabra "cristianismo" significa seguir el ejemplo de Cristo y vivir como lo hizo el. Luego las enseñanzas de Jesús han sido modificas por intereses de los dirigentes cristianos a lo largo de los siglos.
Judaísmo, cristianismo e islam, son las tres grandes religiones monoteístas hermanas y que hemos seguido caminos paralelos.
El problema no es la religión, es lo que se hace en nombre de las religiones... o se predica mucho y se hace todo lo contrario.
No creo que haya religiones malas, pero si muchos seguidores pésimos que predican divino.
☻
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