El gobierno español ha decidido
apoyar ante la Asamblea General
de la ONU, con su
voto afirmativo, la declaración de Palestina como estado observador no miembro
de Naciones Unidas, al mismo nivel que el Estado Vaticano. Este estatus va a
permitir a Palestina ser reconocido como estado, tener una voz propia en su
relación con otros estados y, lo que es más importante, podrá llevar ante el
Tribunal Penal Internacional cualquier violación de las leyes internacionales
que estimen que comete Israel en contra de Palestina y de sus ciudadanos, cosa
que hasta ahora tenía vedada.
La decisión de España no ha sido
fácil. Los países de la Unión Europea
están divididos entre los que apoyan esta declaración (Francia, España,
Portugal, Dinamarca y Austria, además de Rusia) frente a los que la rechazan o
se abstienen (Alemania, Reino Unido, Bélgica, Polonia o Republica Checa). Es
evidente que la influencia de Estados Unidos, contrario a esta declaración, ha
llevado a muchos países a oponerse a esta propuesta, pero es de agradecer la
postura de un gobierno conservador como el español, comprometido con la paz y
la estabilidad en el Próximo Oriente.
Hamas ha manifestado
reiteradamente su total negativa al reconocimiento de Israel como estado
soberano, al abandono del terrorismo y a la continuación de las conversaciones
de paz de Oslo. Es evidente que la única vía para llegar a acuerdos sólidos con
Israel es dando una baza internacional a Abbas y a Al-Fatah, que son los únicos
que apuestan por la paz y la existencia de dos estados en un mismo territorio.
La disyuntiva es evidente y estamos en un periodo crucial en el que se puede
decidir la solución pacífica de este conflicto o el enquistamiento bélico por
décadas.
La apuesta del gobierno español
me ha parecido muy valiente y creo que es de honor reconocer como acertada una decisión
cuando va en la vía correcta y ha sido tomada reflexivamente con la única
finalidad de intentar contribuir a la resolución de un conflicto que ya dura
más de 70 años. Ojala que sirva para poner fin a una guerra larvada y cruel ue
no deja de producir víctimas inocentes.
4 comentarios:
Un Estado nuevo al que masacrar impúnemente.
menuda gilipollada.
Un minúsculo paso en la buena dirección.
Lo siguiente es que alguien se encargue de obligar a cumplir los tratados internacionales al autodenominado "estado de Israel", o entidad sionista.
El paso debe ser más severo. Como han hecho en otras ocasiones, la OTAN debería llevar a cabo un plan de ataque e invasión contra Israel pues este estado ha violado ya no sé cuántos derechos humanos.... Posteriormente los mandatarios israelíes deberían ser sentados en un tribunal y el sionismo erradicado de la faz de la tierra como ideología racista y criminal que es.
A partir de entonces a todo aquel que no se ciña al dogma libertario habría que llamarlo sionista, y no nazi, jajajaja...
Bromas aparte, Palestina debería tomar posesión de todo su territorio y el estado israelí ser disuelto.
La ONU y sus cascos azules deberán garantizar la seguridad de los judíos residentes en la zona, víctimas muchos de ellos de las políticas sionistas, hasta que la situación se estabilice.
Palestina debería tomar posesión de todo su territorio y el estado israelí ser disuelto
Matizo a Daorino. Mi opinión es que sería recomendable tanto la disolución del autodenominado "estado de Israel" como la fundación de un nuevo estado judío para sefardíes y mizrajíes (los dos grupos de judíos con base histórica para reclamar algún tipo de relación con aquél suelo). Naturalmente este estado judío debería tener unas dimensiones mucho menores que las del actual autodenominado "estado de Israel", ser reconocido por Palestina, contar con el apoyo del conjunto de naciones, comprometerse a cumplir los acuerdos internacionales (no ser un estado gamberro como el actual "estado de Israel") y no albergar armamento ni nuclear ni químico.
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